Diente de León

Entre las propiedades del Diente de León destacan su acción diurética, su contibución al buen funcionamiento epático y su relación con la salud de la piel. Gracias a su acción diurética, es un remedio muy utilizado para prevenir la retención de líquidos, ayudando a eliminar toxinas y líquidos en exceso de nuestro organismo. Por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, su consumo regular ayuda a descongestionar el hígado y mejorar su funcionamiento, siendo muy recomendable en casos donde se estén consumiendo medicamentos, en períodos de excesos alimenticios (vacaciones, navidad, celebraciones…) y en caso de sobrepeso.

También es una fuente muy rica de hierro y calcio, por lo que se suele utilizar como complemento natural en los tratamientos contra la anemia y la fatiga.

En la piel también tiene unos efectos muy notables, gracias a la gran cantidad de vitaminas A, C y D y nutrientes que contiene.

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El Diente de León es una planta que también se le denomina Achicoria Amarga. Esta plata prolifera en climas templados y con el paso del tiempo ha aumentado su valor en cuanto a sus capacidades medicinales.

Tiene un sabor agridulce y su altura no suele superar los 35cm. Las hojas del Diente de León son dentadas y de tallo hueco.

De la Planta Diente de León se pueden aprovechar muchas partes, desde la raíz a las hojas, ¡incluso los "frutos" en forma blanca y sedosa! seguro que has soplado un Diente de León más de una vez, favoreciendo que se esparzan las semillas de esta planta.

El Diente de León es una planta que puede crecer en cualquier sitio, también de manera salvaje.

El Diente de León es un ingrediente que ha ido ganando peso en las rutinas de belleza de todo el mundo gracias a la gran cantidad de beneficios que tiene para la piel.

Gracias a su función antioxidante, desintoxicante y reguladora, ayuda a la eliminación de toxinas, a seborregular y acelera el proceso de curación del acné, siendo muy efectivo para reducir la apariciencia de los brotes. También es efectivo a la hora de tratar las cicatrices provocadas por esta patología.

Estas funciones son también perfectas para frenar la aparición de los primeros signos de la edad, ayudando a mantener la piel joven durante más tiemop.

También tienen propiedades antiinflamatorias y cicatricantes, lo que viene genial en casos de quemaduras o irritaciones.

Está muy extendido el uso del Diente de León como infusión, tomando dos al día. Pero existen otras alternativas, como las cápsulas con extracto de Diente de León o las Gotas de Diente de León, perfectas para aquellas personas que no son muy fans de las tisanas y prefieren un remedio rápido y en un formato muy cómodo.

Desde la Antigua Grecia el Diente de León se ha utilizado como elemento en la producción de medicamentos, gracias al efecto contra las molestias estomacales.

A lo largo del tiempo, el Diente de León se ha documentado como una planta medicinal que trata múltiples y variadas dolencias: como por ejemplo enfermedades de los ojos.

Aunque en este largo tiempo, se ha considerado al Diente de León como "limpiadora de sangre", gracias a la estimulación del metabolismo con diferentes patologías como insuficiencias hepáticas, cálculos biliares o niveles de colesterol altos.

Además de en la formulación para medicamentos contra dolencias, el Diente de León también posee propiedades diuréticas o de estimulación del apetito.

Dentro de las múltiples propiedades que tiene el Diente de León como planta medicinal, se encuentran:

El Diente de León ayuda a mantener los niveles de hierro, vitaminas y proteínas correctos, previniendo enfermedades asociadas a la falta de glóbulos rojos y componentes sanguíneos como la anemia.

Gracias a  que el Diente de León contiene calcio, Vitamina C y Luteolina se evita el envejecimiento prematuro de los huesos, fortaleciéndolos.

Otra de las propiedades más destacadas del Diente de León es que mejora y aumenta la producción de insulina, reduciendo el nivel de glucosa en sangre. 

Además de que el Diente de León es una planta con usos gastronómicos, para ensaladas, acompañar sopas o como una hierba aromática, el Diente de León se utiliza, desde la Edad Antigua como una planta medicinal para tratar patologías como los dolores estomacales.

El Diente de León es una planta con un alto contenido en Vitamina A, C y K, así como Vitamina E, Ácido Fólico e Inulina que favorece la microbiota intestinal.

Además, entre las diferentes vitaminas que aporta el Diente de León, también aporta minerales como Hierro, Calcio, Magnesio, Potasio o Silicio.

Estos son los productos más vendidos con Diente de León:

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